Singapur es conocido por 3 cosas, el Gran Premio de F1, ser el cuarto centro financiero más importante del mundo y por ser el segundo país con más densidad de población del mundo. Sin embargo, la zona donde se encuentra desgraciadamente es conocida por su alto riesgo de tifones, y todos sabemos que cuando caen grandes cantidades de agua lo primero en sufrir sus efectos son los garajes.
Mientras el tiempo está tranquilo, la zona de Orchard Road se posiciona como una de las zonas más ricas del lugar, con tiendas de marcas de prestigio y casas caras. Como toda zona de alto standing, se encuentra plagada de aparcamientos subterráneos que no alojan más que coches de alta gama y superdeportivos y aquí no vale eso de "al mal tiempo buena cara". Ha pasado lo que tenía que pasar y esta es la representación gráfica de un sueño húmedo. Ironías aparte, este garaje de Singapur se ha inundado llevándose el agua todo lo que encontraba por delante sin pararse a ver si afectaba o no a los maravillosos superdeportivos que dormían allí. Perdonadme otra broma, pero si llego a ser el agua y lo primero que veo es ese 458 Italia con llantas amarillas, también hubiera arrasado con todo.
Después de este pequeño inciso, vemos los coches que allí se encontraban que pasarán a formar parte de la lista de superdeportivos "de desguace". Entre ellos el Ferrari 458 Italia de antes, un exclusivo Lamborghini Gallardo Superleggera, un Aston Martin V12 Vantage o un acabado Porsche 911 GT3 RS. Entre los vehículos más usuales vemos una colección de BMWs, Audis y Mercedes de gama alta así como un Rolls Royce Ghost. Del que podemos hablar bien, es de un Mercedes Clase G, que el dueño, al parecer se olía la catástrofe y no quería salir damnificado, si es que parte de esos deportivos no eran también de su propiedad...
En fin, os dejamos el triste final de estos sueños sobre ruedas.
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