Mitsubishi Lancer EVO: la evolución llega a su fin

Es un día triste para los amantes del motor. Hace unos meses, RALLYART, el departamento de competición de Mitsubishi cerraba sus puertas. Hoy, el modelo que dió alas al fabricante japonés en el WRC nos deja. 

El titular puede parecer sensacionalista, pero es totalmente real. Las versiones Evolution no se volverán a fabricar (incluímos las versiones todoterreno, aunque menos conocidas en España). Aunque los responsables de la marca aseguran que aún hay demanda, se ven obligados a detener su producción. La razón es que Mitsubishi, redirigirá sus esfuerzos en los vehículos eléctricos, y el EVO, a pesar de ser uno de los automóviles más efectivos y aclamados por los aficionados (sobretodo por los quemadillos a pie de cuneta), no es un chollo, ni siquiera rentable. En parte entendemos a Mitsubishi, no es una ONG, pero no podemos evitar sentirnos dolidos cuando ha caído uno de los mitos del automóvil.

El niño rebelde, pero a la vez el niño mimado de Mitsibishi nos deja, tal vez por culpa de la revolución eléctrica en el mundo de la automoción. Pero se nos antoja incluso lógico. Quiero decir, por una parte, el último EVO, el 10 no ha tenido una aceptación tan alta como las demás series. Quizás se aburguesó demasiado, y ya no ofrecía la imagen radical de los anteriores (es extremadamente efectivo, lo cortés no quita lo valiente). Y por otra parte, desde hace unos años, Mitsubishi abandonó el mundial de rallys, con lo que ofrecer el EVO, ya no era ni un escaparate de tecnología de competición, ni un reclamo, ni una necesidad (por eso producir un número determinado de coches para su homologación en rallys). Había perdido el tirón, la magia de otros tiempos, y esto sumado a la crisis financiera, y a la revolución eléctrica -y a la histeria medioambiental...-, ha acabado con él.

En fin, sólo nos queda conformarnos, esto sólo es el principio, quién sabe si su más directo rival -que ahora no tiene razón de ser-, el Subaru Impreza WRX STi también desaparecerá. Sin embargo, nos queda un escollo de esperanza y de ilusión, de volver a ver las siglas EVOLUTION en futuros modelos de producción, eléctricos, eso sí. Es la teoría de la evolución automotriz.

Esperamos Lancer Evo que te encuentres en el olimpo de los dioses, te lo ganaste.

Fuente: Autocar.