Pronto saldrá a la venta la nueva generación de la Serie 3 y en consecuencia su versión M3, y al parecer prescindirá del V8 de la generación actual. Todo son dudas por el momento, pero corre el rumor de que la próxima generación del M3 apostará por un propulsor V6 sobrealimentado. Con la intención de reducir emisiones, la era turbo llega a BMW y a su división M, como ya hemos visto en el nuevo M5.
Estamos ante una, llamada por algunos, involución en cuanto a motores se refiere. En parte es cierto (aunque ahora son más eficientes), en este caso volveremos a los motores de 6 cilindros, aunque a diferencia de sus antecesores, no parece que opte por su configuración en línea. Toda esta idea no parece nada descabellada, y más viendo como su hermano mayor,
el M5 ha prescindido de su V10 para dejar paso a un V8 turboalimentado, compartido con los X5M y X6 M (aunque ligeramente potenciado). Este motor V6 turbo,
al parecer ofrecería unos datos de potencia y par muy similares al actual V8 de 420CV, aunque es seguro que ofrecerá mayores prestaciones.
Otra de las teorías, aunque poco probable y casi descartable, sería adaptar el actual 4.0 V8 del M3 a la sobrealimentación mediante un sistema de doble turbocompresor. Además de en la versión radical de la berlina, también podría ser usado en los próximos X3 M y Z4 M.
Los amantes de la serie M de BMW, ya pueden irse olvidando de los motores atmosféricos de altas vueltas y característico sonido. Una pena, pero este es el rumbo que ha tenido que tomar la industria del automóvil. Aunque tampoco nos desanimemos, estos nuevos propulsores nos ofrecerán las sensaciones que nos ofrecían los atmosféricos, a su manera, pero lo harán.
Ahora sólo falta saber: ¿Apostará el próximo M3 por la tracción integral como el M5?
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